“La lectura hace libres a los que la practican”, afirmó el Premio Nobel Mario Vargas Llosa, en la pasada Feria del Libro de Buenos Aires.

Después de esta afirmación, podemos decir que los beneficios de leer un libro, incluyen una mejora en nuestra vida a nivel mental, espiritual y social. Además, si desarrollamos el hábito de leer, nuestras habilidades de comprensión y retención aumentarán.

La lectura de libros no sólo nos hace combatir el aburrimiento, sino que nos hace más inteligentes. También fomenta el desarrollo personal y profesional, favorece la conversación y las relaciones, libera emociones, es el ejercicio para mantener un cerebro sano y animado, además de ser un antídoto contra la soledad.

A través de varios estudios universitarios de Yale y Harvard, determinaron que leer activa la inspiración, la imaginación y el surgimiento de ideas. Hace que el pensamiento vaya más allá del texto y se adentre en nuevos mundos, hace que quiera adelantar acontecimientos y crear caminos alternativos.

Decimos que el hábito de la lectura nos hace libre, porque teniendo en cuenta lo antes mencionado, la lectura aumenta la comprensión, la atención, la observación, la reflexión, el pensamiento crítico y la memoria de las personas. Nos permite tener los recursos necesarios y la agilidad mental para elegir y tomar decisiones. Y decimos que uno es libre cuando decide por sí mismo y no lo hacen por él.

La lectura, además de activar el cerebro, hace que se amplíe el vocabulario, mejore la gramática y la ortografía, favorezca la consecución de habilidades verbales, rapidez mental, toma de decisiones y confianza. Hace que se desarrolle el instinto afectivo y moral, lo que lleva a las personas a ser más abiertas. Pueden compartir, conversar y enriquecer contactos. El ser humano lector surgió de su constante lucha contra la distracción, porque el estado natural del cerebro tiende a despistarse ante cualquier nuevo estímulo. Por eso repetimos que leer favorece la concentración, permite la relajación, el descanso e incluso es capaz de reducir el estrés.

Estoy convencido que las bondades del arte en todas sus expresiones, en todas sus expresiones, nos convierten en personas libres y que también se es libre, para hacer el bien.

Pretendo concluir en mi opinión sobre este tema con una pregunta que se hace Hegel en su manifiesto filosófico: ¿Qué significa ser libre?

Y determino que la lectura crea un compromiso cognitivo que mejora el vocabulario y la capacidad de pensar. El que seamos seres pensantes, nos hace libres para tomar decisiones, para elegir y para ser determinantes.

Por todo lo expuesto, llego a la conclusión que la lectura, es la que nos hace libres.

Por Sandro Álvarez. Escritor. Poeta.